Tras el confinamiento por la pandemia del COVID-19 la situación de los lesionados y sus reclamaciones ha cambiado. El confinamiento, obligó a interrumpir tratamientos presenciales y los centros de fisioterapia siguieron funcionando con recursos telemáticos, controlando el cumplimiento del plan de ejercicios propuestos.
Estas circunstancias inesperadas han resultado perjudiciales para los lesionados, ya que algunas aseguradoras no reconocen la rehabilitación domiciliaria realizada durante el confinamiento. Es por eso que el informe médico pericial se ha constituido en la pieza clave para el éxito de la reclamación tras sufrir lesiones como consecuencia de un accidente de tráfico o padecer una incapacidad laboral.